Paseamos uno junto al otro. Ana se ha quitado el casco de
piloto y deja que el viento azote su yo melena. Sin embargo, yo me veo en la
obligación de mantener el antifaz pegado a mi cara.
-¡Mira! - exclama Ana parándose frente a un cartel que hay a
dos manzanas de la fiesta - ¡Echan Crepúsculo en el cine! ¿Quieres que vayamos
a verla?
No me soy un apasionado de Edward Cullen y Bella Swan, pero
acepto.
-Genial. Nos toca correr. Empieza dentro de veinte minutos.
En cuanto termina de decir eso se gira y comienza a correr.
Es muy rápida, pero al llevar el pesado traje y el casco en las manos no me
cuesta mucho alcanzarla. La capa que llevo sobre mis hombros oscila a un lado y
a otro. Cuando pasamos junto a un grupo de niños pequeños se quedan
boquiabiertos ante la escena.
Llegamos al final a las puertas del cine, que está vacío. Me
detengo para tomar aire mientras Ana se apoya en una farola y hace lo mismo.
-Vamos – me indica con el brazo.
Nos acercamos a la taquilla y compramos dos entradas y un
paquete de palomitas enorme. Después entramos en la sala donde sólo hay un par
de parejas y un grupo de adolescentes. Al haber tan poca gente decidimos
sentarnos en las sillas más alejadas de las adolescentes. La película ha
empezado hace un rato.
-Siento que no hayamos llegado a tiempo – comenta en voz
baja.
-Da igual, tampoco me llamaba la atención la película – al
principio temo ofenderla, pero decido no ocultarle nada.
-A mí tampoco me gusta especialmente, era por hacer algo.
-¿Eres de Edward o de Jacob?
-De Edward, sin ninguna duda. Aunque bueno, después de leerte
los libros, no eres de ninguno.
-¿Y de los Juegos del Hambre? ¿Eres de Peeta o Gale?
Se gira para mirarme y, a pesar de la oscuridad, veo que
tiene el ceño fruncido. Pero cuando habla, no muestra enfado.
-Eso no es algo que debas preguntarle a una tributo. Soy de
ambos.
-No sabes mentir.
-Lo sé – ríe en voz alta y una de las parejas nos pide que
nos callemos. Así que baja la voz – Bueno, ¿que tal esta última semana de
rodaje?
-Estás cambiando de tema.
-En efecto. - vuelve a reír pero esta vez la pareja no se
queja – Pero respóndeme.
-Ha estado bastante bien. Tuvimos que repetir todas las
escenas por lo menos tres veces ya que en todas salía el director pegándome
voces para que me concentrara – a mi lado, Ana abre mucho los ojos – Estaba
preocupado por ti. Y para colmo Sam me pasó el número de la academia de
idiomas, cuyas clases daba por las noches, y apenas dormía. Así que al día siguiente
las maquilladoras pasaban el doble de tiempo maquillándome y acababa bostezando
en mitad del Desfile de los Tributos. ¿Te lo imaginas?
Ana niega lentamente con la cabeza y veo como intenta
contener la risa.
-Así que... ¿estabas preocupado por mí?- pregunta con
timidez.
-Pareces saberlo todo sobre mí, pero yo apenas sé cosas sobre
ti. Dime, ¿qué haces en tus tiempos libres a parte de leer?
-¡No cambies de tema! - dice golpeándome el brazo.
-¿No es justo? Tú has esquivado uno de mis temas y yo otro de
los tuyos. Estamos en paz.
-No, no lo estamos.
Se que en testarudez no gano contra ella, así que me dejo
caer aún más en el asiento y suspiro.
-Me dijiste que nunca dejarías de hablarme. Además, recuerdo
que el día que dejaste de hablarme parecía que iba a pasar algo. Tú lo sabías y
me lo decías. Pensabas que eran imaginaciones tuyas, pero algo gordo tuvo que
pasar para desaparecer por completo de Twitter. Al final decidí hablar con Álex
y me contó algo de aquel sábado. Pensé que tal vez conseguiría que te
despejaras un poco si venía.
Ana, quien se ha mantenido callada y mirándome fijamente,
esboza una amplia sonrisa.
-Lo has conseguido – dice finalmente.
Se gira y vuelve a clavar la mirada en la pantalla sin
embargo yo sigo mirándola.
-Y bien, ¿vas a contarme algo sobre ti?
-Pregunta – dice, encogiéndose de hombros.
-¿Qué te gusta hacer a parte de leer?
-Comer, aunque últimamente tengo ese hábito algo abandonado –
dice riéndo.
-Te pareces a Jenn – comento.
-¿En serio? - se gira con una enorme sonrisa en la cara.
Asiento y le devuelvo la sonrisa.
-¿Trabajas en algo?
-Sólo de vez en cuando – dice encogiéndose de hombros – Mi
tío trabaja en un parque de atracciones y de vez en cuando me deja colarme. No
estoy encargada de las atracciones porque para ello tengo que hacer un curso,
sino que me encargo de entretener a los niños pequeños.
-¿Te gustan los niños pequeños?
-Me encantan. En el parque hacemos juegos, los maquillo... A
veces me disfrazo de personajes de dibujos famosos. Me encanta verlos sonreír.
Ver que son felices.
-¿Tienes hermano?
Se gira para observarme y noto miedo y tristeza en sus ojos.
-Yo... no. Soy hija única. - baja la mirada y frunce el ceño.
-¿Quieres contármelo?
Toma aire con fuerza y levanta la mirada, enfrentándose a mis
ojos.
-Tuve una hermana pequeña, Rut. Ella...murió con cinco años,
cuando yo tenía diez. Estábamos en la calle y nos peleamos. Ella salió
corriendo y cruzó la carretera... - la voz se le quiebra, pero aún no deja que
ninguna lágrima caiga por su rostro – Pasó muy rápido. Yo apenas me di cuenta.
Oí voces y un ruido horrible. El coche
había intentado apartarse del camino, pero no había sido lo suficientemente
rápido, y se había estrellado contra una casa. El cuerpo de mi hermana había...
había...
No le dejo continuar, me acerco a ella y la envuelvo en un
abrazo. Ella apoya su cabeza en mi hombro durante un rato y, cuando se separa,
no hay rastro de que alguna lágrima haya caído por su cara.
-Por eso mis padres están siempre de viaje – continúa –
Llevan siete años yéndose cada fin de semana. No son capaces de verme porque
dicen que me parecía mucho a ella. Verme les tortura. Además, en cierto modo
creo que me odian.
-No te odian – contesto con decisión, pero ella ignora mis
palabras.
-Al principio, hasta que cumplí los quince, me quedaba con mi
tío. Así fue como empecé a ir al parque de atracciones a hacer reír a aquellos
niños. Al principio lo pasaba mal, pero al final mi tío consiguió lo que se
proponía, lo superé. Dejé de llorar, dejé de tenerles miedo, me divertía con
ellos y los añoraba cuando no estaba con ellos. Aquellos renacuajos me hacían
feliz. - ahora, la alegría ha sustituido a la tristeza en su rostro – Después
conocí a Estefi y a Álex y dejé de ir con mi tío. Aún así intento ir todas las
semanas. - guardamos silencio y entonces su cara se ilumina - ¿Quieres venir
mañana conmigo?
-¿Qué? - pregunto sorprendido. - No creo que sea buena idea.
-¡SÍ! ¿Por qué no?
-Me pueden reconocer, Ana.
-¿Y qué más da? No me seas aburrido, Josh. Será genial. Por
favor.
No puedo negarme ante esa euforia, así que al final asiento.
-Está bien.
-¡SÍ!
-¡¿Puedes callarte?! - grita una de las adolescentes de la
otra punta del cine – Intentamos ver al buenorro de Jacob y tú con tu estúpida
charla no nos dejas ver la película. Así que cierra la bocaza.
Ana se queda boquiabierta y se gira hacia mí. Coge un puñado
de palomitas y las lanza en dirección a las chicas. Se agacha rápidamente y
comienza a reírse en voz baja. Las chicas comienzan a quejarse y a gritar.
-¿Estás loca? - digo, agachándome junto a ella entre los
asientos.
-¡Aburrido! - exclama ella entre una tos fingida.
-No soy un aburrido – digo mientras se levanta y tira otro
puñado de palomitas.
-¿Nunca has hecho esto? ¡Aburrido! - exclama de nuevo.
-Que no soy un aburrido – le quito la bolsa de palomitas y
cojo un puñado
Me pongo de pie, descaradamente y lo lanzo hacia atrás, hacia
la pareja que nos había regañado al principio. La chica grita y el chico se
pone de pie y le dice: 'Vámonos'.
-¿Qué haces? - pregunta Ana.
-Si se lo tiramos a ellas, ¿por qué no ha todo el mundo?
Ana ríe y coge otro puñado. Esta vez lo lanza hacia arriba,
haciendo que las palomitas caigan sobre nosotros y sobre los asientos vacíos.
La miro extrañado.
-Sí. Contestando a mi pregunta anterior, estás completamente
loca.
Me mira y sonríe. Entonces enlaza sus brazos por detrás de mi
cuello y se acerca a mí, juntando nuestros labios justo después de responderme:
-Lo sé.
ashjdhfjkd s AMO ESTE CAPITULO,estuvo perfecto ,Josh es tan perfecto ,ay y Ana ,me encanta
ResponderEliminarquiero otro ,ejeje :3
Jajaja me alegra que te haya gustado, no estaba muy segura de él ^^
EliminarSin duda es el mejor... lloro
ResponderEliminarJajaja es el que más me costó escribir, sin duda x)
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